domingo, 22 de febrero de 2009



a Rayo

Fue un aguacero

esa vez simplemente la noche exploto en llanto

acaso el dolor incontenible

tu fragilidad cedio definitivamente

alguien, acaso vos mismo, dijo basta.

Un reguero de preguntas.

la respuesta sin posdata.

¿Que dira el arbol de tu vereda?

¿que dira tu casa naranja?

que sera de los tuyos, siempre tuyos...

sigue lloviendo

la eternidad de la ausencia

y tu recuerdo hecho carne, que sangra.

Lo escribio Nora, para Ralli, hace ya tres años, es una pequeña cronica del dia mas desesperante de mi vida, aun me duele la garganta del grito contenido.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Me emociona tu entereza como también tu habilidad de hacer que hasta el dolor se transforme en algo bello. Me provoca admiracion......

PeregrineBlue dijo...

que poema mas maravilloso. Sera la perdida de un hijo? Asi lo presenti habiendo yo perdido a mi Cristobal. te envuelvo en mil abrazos.

LUMARCHINI dijo...

me encantaria saber la historia...para compartir el peso.de eso se un poco...saludos!!!!